Coloquio de Conservadores del Patrimonio Cultural
La justicia, el territorio como medio ambiente y el patrimonio biocultural, así como los derechos culturales, necesitan una consciencia colectiva que valore y respete la diversidad cultural y ecológica. Hemos creado categorías en el conocimiento, pero en la vida diaria todo está unido, más allá de lo académico y urbano. Los seres humanos utilizaron los recursos naturales para crear herramientas, objetos decorativos y registros de sus actos, adaptándose y defendiendo sus territorios. La cultura y lo biocultural son inseparables y definen a las sociedades.
La conservación ha abordado estos objetos culturales desde una perspectiva científica y académica, con discursos autorizados (Smith, 2011). Aunque se han establecido vías de participación comunitaria, aún queda camino por recorrer para conectar estos objetos y sitios con sus comunidades y territorios desde la conservación. Los conservamos en beneficio de las personas (Ashley-Smith, 1994). Sin embargo, ¿cómo definimos el territorio? ¿Por qué debe formar parte de la justicia social, cultural y ecológica? ¿Cuál es nuestra postura ante los patrimonios bioculturales?